Fallece un electricista que había sufrido un golpe de calor en Olivenza

Segunda muerte en menos de una semana a causa de un golpe de calor en Extremadura. Un electricista de 52 años, Ignacio del Pozo Barrón, falleció el viernes pasado en el hospital Infanta Cristina de Badajoz. Allí había llegado en estado crítico el jueves después de que fuera atendido en primera instancia en el centro de salud de Olivenza.

A escasos metros de ese centro sanitario, en el pequeño auditorio del antiguo convento oliventino de San Juan de Dios, había estado trabajando en los últimos días en el auditorio a cielo abierto del convento San Juan de Dios, espacio que acoge, entre otras dependencias, el centro de interpretación de Alqueva y la oficina de turismo. Según confirmó a HOY el alcalde, Manuel J. González Andrade, el electricista estaba realizando la sustitución de un cableado y unos focos.

Según Raúl Leitón, camarero del bar-restaurante del complejo, sobre las 14:00 horas bajó al establecimiento a la hora de comer y se pidió unas consumiciones. «Se le notaba como somnoliento sobre la barra y según nos dijo tenía poco apetito y el cuerpo le pedía beber mucho», explicaba a este diario el hostelero que en los últimos días había estado tratando con el electricista y que incluso habían hablado del calor extremo que hacía en los últimos días y que la jornada laboral intensiva no la iniciarían hasta el próximo 15 de julio.

Sobre las 15.00 horas, Leitón cerró el establecimiento y a la salida vio que el electricista, que en ningún momento le transmitió que se hallara indispuesto, se hallaba dentro de su coche, aparcado en la puerta del convento de San Juan de Dios, puesto en marcha y con el aire acondicionado. «Como me había dicho que no retomaba la jornada hasta las cuatro y media, pensé que estaría descansando», afirmó Raúl Leitón, quien a las 15.30 horas tuvo que ir otra vez al bar y vio que ya no estaba Ignacio del Pozo ni el coche.

Un compañero de trabajo le había llevado al centro de salud por su indisposición. Llegó inconsciente y de allí fue trasladado al Hospital Infanta Cristina. Había sufrido hipertermia (su cuerpo alcanzó los 41,5 grados de temperatura) y no logró sobrevivir tras ser atendido en la UCI del hospital pacense, falleciendo en la mañana del pasado viernes.

El fallecido era natural de la vecina localidad de Higuera de Vargas aunque residía en Badajoz. Estaba casado y tenía una hija. Era uno de los diez hermanos de una muy conocida familia higuereña. Uno de sus hermanos es José Luis del Pozo, jefe del servicio de Ordenación y Gestión Forestal de la Junta. El funeral fue celebrado en la mañana del sábado en la iglesia pacense de San Juan de Rivera.

Segundo fallecimiento

Esta es la segunda víctima mortal de las altas temperaturas, ya que el pasado 17 de junio, un hombre de 75 años natural de Villagonzalo, en la comarca de Mérida, falleció por un golpe de calor cuando estaba en un huerto familiar sobre las cinco de la tarde. Fue trasladado al centro de salud de La Zarza e iba a ser enviado al hospital de la capital de Extremadura cuando se produjo su muerte.

Además, el lunes pasado, un hombre de Lobón, en las Vegas Bajas del Guadiana, de 38 años, sufrió otro golpe de calor en la pedanía montijana de Barbaño. Fue ingresado en estado crítico en el hospital Infanta Cristina. Según confirmaron fuentes del SES a este periódico, su evolución sigue siendo positiva aunque sigue estando en la UCI.

Además, según la Subdirección de Epidemiología de la Dirección General de Salud Pública del SES, el pasado miércoles fue atendido otro varón de entre 40 y 50 años en el centro de salud de Miajadas con síntomas de golpe de calor. Fue trasladado al Hospital Don Benito-Villanueva. Recibió el alta al día siguiente. También han recibido el alta otras personas que también han sufrido golpes de calor en Mérida, Badajoz y Navalmoral de la Mata.

A pesar de que las temperaturas han dado una tregua en la región y bajarán más a partir de de hoy, se siguen manteniendo las recomendaciones de evitar una exposición prolongada al sol e hidratarse.