Borrar
Entrega del título de Hija Predilecta de Olivenza.
Y la semilla de Choni Ramallo de la Granja germinó en Olivenza

Y la semilla de Choni Ramallo de la Granja germinó en Olivenza

Es innegable el importante papel que desempeñaron mujeres como Choni Ramallo en la recuperación del folklore local

JUAN MIGUEL MÉNDEZ PEÑA

Miércoles, 5 de septiembre 2018, 00:47

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El actual grupo de coros y danzas 'La Encina' de Olivenza, en el 75º aniversario de su fundación, ha organizado una exposición que recorre toda su trayectoria a lo largo de estas ocho décadas y en la que han dejado constancia de la memoria de sus principales fundadores: Antonio González Martínez 'Mantequiña', que ocupó un papel importante en la recuperación de melodías del folklore oliventino, y, cómo no, Encarnación 'Choni' Ramallo de la Granja, alma mater del grupo practicamente hasta su fallecimiento.

Choni Ramallo nació en Olivenza en 1925, siendo la menor de tres hijos habidos en el matrimonio de Joaquín Ramallo, zapatero de profesión, y de Encarnación de la Granja, modista. Junto a sus hermanos llegaría a sentar las bases del que hoy es uno de los grupos folklóricos decanos en Extremadura, llegando a recorrer gran parte de la geografía española divulgando las danzas oliventinas.

En la Olivenza de principios de los 40, aún mermada y mutilada por las consecuencias de la Guerra Civil y la posterior postguerra, el foco de la cultura se centró en la recuperación de la cultura popular y las tradiciones locales. En muchos municipios como Olivenza, esta fue una tarea en la que tuvo un papel primordial la Sección Femenina (SF) de la Falange Española, y de la que dependía una organización, Coros y Danzas de España, fundada en 1939 y que en sus inicios se dedicó a recoger, recuperar y conservar el folklore local que ha llegado hasta la actualidad.

Estas circunstancias hicieron que Choni Ramallo se incorporara a la entonces Sección Femenina, cumplida la veintena. Según Emilia Alburquerque Álvarez, en ese tiempo las delegadas locales Dña. Antonia y Dña. Mariana Santos disponían de escasos recursos para esa labor de recoger pasos de danzas, indumentarias, etc. Acompañadas por el maestro 'Mantequiña', era habitual verles visitar a mayores en la ciudad y sus pedanías para tal recopilación de bailes y melodías. Y de ahí salió lo más granado del folklore oliventino, canciones y coreografías mundialmente conocidas como 'La Uva' o 'El Candil'.

Sembrando semilla

Choni participa en esta labor compatibilizándolo con el equipo de deportes de Badajoz, ciudad que con Olivenza eran pioneras en la constitución de grupos folclóricos se refiere. Según Emilia Alburquerque, aquí se evidencia también el importante papel de la mujer en esta labor, pues fueron principalmente ellas quienes en principio acompañaron en el baile a Choni Ramallo, que llegaría a trabajar como dependienta en una tienda y en una plaza en un taller de costura. Ya en los años 50 se dedicaba a impartir gimnasia, deportes y bailes en los diferentes colegios de la localidad, sembrando la semilla entre centenares de niños y jóvenes que poco a poco se enrolarían en 'La Encina', en la que impartía clases de forma gratuita, viendo en ella una referencia que aún hoy perdura en la memoria colectiva.

La actual directora de 'La Encina', María del Carmen Núñez Mangas, recuerda que comenzó haciendo gimnasia rítmica con Choni. «Fue mi mejor amiga, Maribel Carapeto, quien me convenció para entrar en el grupo juvenil de bailes y cuando cumplí los 16 años entré en el de adultos», evoca Mari Carmen Núñez.

Su método, su disciplina y tenacidad es lo que más y mejor recuerdan (y agradecen) quienes tuvieron la suerte de ser sus alumnos. «A ella le debo mi amor por el folklore», apunta Núñez, que recuerda que el momento más difícil en el grupo fue sus comienzos como directora, en el que tuvo que ocupar un espacio antes ocupado por Choni Ramallo, que siguió aportando su granito de arena incluso hasta después de jubilarse como modista a los 65 años.

Retirada y legado

La muerte de sus hermanos le hacen abandonar por completo su actividad en el grupo, pero sigue el día a día 'La Encina' hasta que por motivos de salud se retira, falleciendo el 21 de diciembre de 2008, a los 83 años, dejando un generoso legado y un patrimonio cultural recuperado orgullo del pueblo oliventino.

En el otoño de su vida también fue reconocida por el Ayuntamiento como Hija Predilecta de Olivenza, «por la ingente labor desarrollada en pro de la divulgación del folklore en nuestra ciudad». Pero el mejor reconocimiento se lo hacen día a día los actuales componentes de 'La Encina', tanto el cuerpo de baile que tanto le debe, como la rondalla dirigida por Jorge Martínez Botello, y que en la última década han dado nombre a dos festivales folklóricos anuales, siendo uno de ellos infantil y juvenil, en el que juega un papel fundamental el grupo 'Los Chaparritos', el futuro del grupo.

Mujeres como Choni Ramallo, en un tiempo en el que la participación social de la mujer estaba relegada a determinados ámbitos, jugaron un papel fundamental en la preservación de la cultura popular e idiosincrasia de un pueblo como el oliventino.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios