

Eva María Nevado
Lunes, 20 de junio 2016, 16:05
Con la sincera modestia de quien lleva media vida entregado al voluntariado sin esperar nada a cambio, Ismael Rodríguez Álvez recibió sorprendido la noticia de que su trabajo había sido reconocido con la Medalla al Mérito de Protección Civil en su categoría de Bronce con distintivo Azul; una distinción que recibió el pasado 7 de junio en Madrid de manos del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz.
«A mí, ¿por qué?», esas fueron las primeras palabras que este oliventino pronunció cuando el presidente provincial de Cruz Roja, organización en la que Rodríguez lleva trabajando como voluntario 24 de sus 38 años, le comunicó el reconocimiento recibido por una labor que inició en un campamento infantil de la ONG en el Pantano de Piedra Aguda.
Con 14 años, Ismael llegó a un mundo como el del voluntariado que «me aporta mucho más de lo que yo puedo aportar» y en el que considera que si todo el mundo pusiera su granito de arena la sociedad actual podría funcionar un poco mejor.
Este voluntario oliventino ha realizado labores en prácticamente todos los ámbitos en los que Cruz Roja trabaja pero es en el Equipo de Respuesta Inmediata en Emergencias (ERIE) Psicosocial en el que ha vivido algunos de los momentos más difíciles, como los del terremoto de Lorca, el incendio de la Sierra de Gata o el accidente del tren Alvia en Santiago de Compostela.
En la otra cara de la moneda están momentos como los compartidos hace tres años en un campamento infantil en La Vera, ya que Rodríguez asegura tener predilección por el voluntariado con niños y niñas, aunque es uno de los ámbitos en los que menos ha trabajado.
Es precisamente con los más pequeños con quienes Ismael considera que se debe realizar una mayor labor de concienciación sobre la importancia del voluntariado, aunque reconoce también que en los institutos a los que ha acudido a dar clases de primeros auxilios «son varios los chicos y chicas que se acercan a preguntarnos qué deben hacer para entrar en Cruz Roja».
Con la sensación de no entender aún por qué algo como su labor de voluntario, que le aporta una gran satisfacción, merece una medalla, Ismael recuerda sorprendido el acto de entrega de las distinciones, «que no creí que iba a ser tan protocolario»
Ismael agradece además su presencia a la delegada del Gobierno en Extremadura, Cristina Herrera, que se trasladó a Madrid para acompañarle a él y a la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de Navalmoral de la Mata (Cáceres) en esta jornada tan especial en la que se reconoció a personas y colectivos que han superado el nivel de exigencia reglamentaria, contribuyendo a prestigiar las funciones de Protección Civil.
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