

Eva María Nevado
Miércoles, 18 de noviembre 2015, 22:43
Una expedición formada por unos 30 niños, familiares y monitores de la Escuela Deportiva A Vila se desplazó el pasado sábado hasta el Polideportivo Nuria Caballinas, en la capital pacense, para asistir al partido de baloncesto en silla de ruedas que enfrentaba al Mideba Extremadura con el BSR Amiab Albacete.
El objetivo de esta salida responde a uno de los fines de la escuela deportiva oliventina que busca mostrar a los más jóvenes como el deporte es algo más que competición. En el caso de este encuentro de baloncesto el mensaje que se ha querido transmitir es que «no hay límites, todo es posible», como señalan desde A Vila.
Al término del encuentro, jugadores y monitores bajaron a la cancha para compartir unos minutos con los jugadores y hacerse todos juntos una fotografía. Ambos clubs se emplazaron a hacer lo posible por volver a visitar al equipo extremeño de baloncesto en silla de ruedas o sean ellos quienes visiten Olivenza para compartir una jornada deportiva en la que jugadores y familiares se pongan en la piel de los jugadores del Mideba.
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