Herido un vecino de San Jorge por el ataque de un pit bull

Tras disfrutar de una mañana practicando ciclismo junto a dos compañeros del club Os Pelinhas MTB, el vecino de San Jorge de Alor J.G.B. regresaba ayer a casa por un camino que une la EX105, carretera de Valverde, con la BA-103, carretera que enlaza Olivenza con San Jorge de Alor, cuando fueron atacados por dos perros de raza pit bull sueltos y sin bozal.

Sobre las 11 horas, los tres ciclistas circulaban por el citado camino cuando vieron a los canes tranquilos y sin ladrar junto a una casa de campo situada en la ruta. Los tres hombres continuaron su camino sin detenerse pero en el momento de rebasar a los perros estos comenzaron a perseguirles llegando a alcanzar a J.G.B. que circulaba en último lugar.

Uno de los animals clavó sus colmillos en el gemelo de la pierna izquierda del ciclista y le produjo diversos arañazos, como el propio deportista relata. «Gracias a que íbamos en bicicleta pudimos acelerar la marcha y alejarnos de ellos pero si hubiéramos ido caminando o si hubiera atacado a unos niños, no sé lo que hubiera podido ocurrir», asegura J.G.B.

Localizados los dueños de los perros, para cuya tenencia poseen licencia, se constató que los animales estaban debidamente vacunados, aunque no tienen seguro, según J.G.B., y el herido recibió la atención sanitaria necesaria antes de realizar la denuncia pertinente por el ataque de unos canes de raza potencialmente peligrosa que se encontraban sueltos y sin bozal.

Como recuerda la campaña que en el mes de abril puso en marcha la Policía Local de Olivenza, la tenencia de canes de razas potencialmente peligrosas está sujeta a la concesión de licencia municipal, supone poseer seguro de responsabilidad civil, los animales deben caminar por las calles con bozal, no pueden ir sueltos y han estar, necesariamente, inscritos en el registro municipal de animales potencialmente peligrosos.

El incumplimiento de estos y otros requisitos por propietarios de perros de razas peligrosas pueden conllevar multas que van desde los 300 euros, por llevar al animal sin bozal, hasta los 2.400 por no contar con la correspondiente licencia municipal para su tenencia.